botones

11 noviembre, 2016

NO ME ACOSTUMBRO

EL AGUIJÓN

NO ME ACOSTUMBRO

POR: ARTURO MOLINA

No me acostumbro a vivir en un país donde la gente muere de mengua, pasa hambre y se violan los derechos elementales de la vida en sociedad.

No me acostumbro a ver a los revolucionarios siglo XXI emitir opiniones sesgadas para excusarse de sus responsabilidades.

No me acostumbro a vivir bajo el manto del miedo y el abuso de los cuerpos de seguridad del régimen.

No me acostumbro a caminar por las calles y ver a los ciudadanos haciendo largas colas para ver si pueden comprar algo para comer.

No me acostumbro a ver a mis coterráneos navegar en redes sociales buscando el auxilio para poder encontrar la medicina requerida para su tratamiento.

No me acostumbro a ver como el régimen y su partido PSUV destruyen el aparato productivo nacional para crear escasez e inflación, y posteriormente traer mercancía importada y con sobre precio, para ser revendida a los ciudadanos, por mafias enquistadas en el poder.

No me acostumbro a ver como el régimen fija precios internacionales a la gasolina, mientras a otros países se la regalan.

No me acostumbro a escuchar al oficialismo hablar de fraude y ver la activación inmediata de los militantes del PSUV que controlan las instituciones, para perpetuar violaciones al texto legal y voluntad de los ciudadanos.

No me acostumbro a oír a dirigentes de oposición hablar de dictadura y ser ellos en sus organizaciones políticas dictadores.

No me acostumbro a oír y ver a factores de oposición denunciar exclusiones y ser ellos promotores de tales aberraciones.

No me acostumbro a ver escenarios donde algunos presos políticos gozan de beneficios y a otros los torturan.

No me acostumbro a ver y oír que lo establecido en la Constitución es violentado por el oficialismo, y al dar la vuelta ver que algunos sectores de oposición hacen lo mismo.

No me acostumbro a ver los delincuentes destruir el país y posteriormente reclamar impunidad mediante el diálogo.

No me acostumbro a ver intermediarios que se han beneficiado de lo que le pertenece a los venezolanos, (excluyo la iglesia),  y vengan ahora a dictar la norma para la convivencia y resolución de problemas internos.

No me acostumbro  a que la mediocridad gobierne la administración pública nacional.

No me acostumbro a oír la sandeces de gobernantes y a otros de alcahuetearlas.

No me acostumbro a ver como el régimen destruye las universidades y oír de otros que eso es una pendejada.

No me acostumbro a ver como el régimen desprecia a la juventud estudiosa, obligándolos a abandonar el país para buscar en otros lugares las oportunidades aquí negadas.

No me acostumbro a ver como las ideas o aportes de individualidades para salir del atolladero, son despreciadas por caprichos e intereses personales del oficialismo y algunos sectores de la oposición.

No me acostumbro a ver como los inmediatistas se arrastran ante el opresor, colaborándole para terminar de arrinconar al oprimido.

No me acostumbro a ver el control social que aplica el régimen permanentemente a los ciudadanos para obligarlos a aceptar su modelo político y económico.

No me acostumbro a ver una infancia mal alimentada, desnutrida, por obra de malandros secuestradores del poder.

No me acostumbro a la manipulación, la hegemonía política partidista, el odio y la polarización. Contra ello lucho con dignidad.

No me acostumbro a asumir lo inmoral y anti ético como valido.

No me acostumbro.

ARTURO MOLINA
@JARTUROMS1
www.jarturomolina.blogspot.com


06 noviembre, 2016

LA MESA DE DIÁLOGO NO DEBE CONVERTIRSE EN ALGO PERMANENTE

Claudio Fermín:

 La mesa de diálogo no debe convertirse en algo permanente

Caracas, 6.11.2016 / Prensa A.C.Soluciones 
   
“Como venezolano, aspiro que a esa mesa no se le vaya a dar una continuidad tal que genere departamentos y hasta un ministerio para el diálogo, o que pueda convertirse en algo permanente. Para el 11 de noviembre anunciaron una próxima reunión, pero los venezolanos esperamos resultados concretos; queremos que se restablezca el orden constitucional, y eso pasa por el restablecimiento de la diputación del Estado Amazonas, que se respete el derecho que tenemos de estar representados en la Asamblea Nacional; que se restituya la fecha para la elección de gobernadores y se respete nuestro derecho al revocatorio. Pero lo que no se puede hacer, es montar una mesa para tomarle el pelo a Venezuela. Eso sería una gran decepción que podría enardecer a un pueblo que está esperando decisiones”, expresó el líder político nacional, Claudio Fermín, presidente de la Asociación Civil Soluciones, durante su participación en un foro público transmitido por la emisora Radio Sensación.

El programa, conducido por el periodista Enrique Arteaga, tuvo como escenario la plaza Lino de Clemente, de la California Sur, y contó con la asistencia de dirigentes políticos y vecinales de los municipios Sucre y Chacao, así   como de un nutrido público constituido por personas que se acercaron al lugar para escuchar a los participantes de la transmisión remota. Fermín abordó variados aspectos sobre la situación política del país, donde prevaleció su criterio sobre la necesidad de plantear soluciones basadas en los recursos con los que cuenta la nación y, de manera especial, en su potencial humano.

No hay aumento que valga 
     
Atendiendo a una pregunta del moderador sobre la incidencia del reciente aumento salarial anunciado por el presidente Maduro, dijo Claudio Fermín que no hay aumento de salario que valga, mientras se mantenga un modelo económico como el que soporta Venezuela, que se niega a impulsar el aparato productivo y se empeña en quebrantar la fortaleza del bolívar. Indicó, que durante los últimos 18 años, Nicolás Maduro ha concentrado un poder absoluto, representado en leyes habilitantes en materia económica y estado de excepción que, lejos de rendir los resultados esperados, ha fracasado; porque “ha partido de una primicia equivocada, como insistir en que el problema radica en un presunto acaparamiento de los productos que requiere la población para su subsistencia”

Citó que de esta manera se observa como productos que ante exportaba el país, entre ellos ganado, café, aceites y cemento, hoy deben ser comprados en el exterior, porque el gobierno solo se ha ocupado de perseguir a empresarios y comerciantes y cerrar  empresas productivas del país, y no hay una sola medida que incentive la producción. “Solo cadenas de radio y televisión”, agregó.

Se refirió en este sentido a lo que percibe como distorsiones en los mecanismos de aumentos salariales que, en su criterio, en la misma medida que se anuncian los incrementos se hacen más inaccesibles los productos a los quienes la perciben, mientras que por otro lado, provocan el despido de trabajadores y cierre de pequeñas y medianas empresas que no se encuentran en capacidad de asumir las nuevas cargas salariales.

En Venezuela hay una protesta existencial

Para Claudio Fermín la gente participa cada vez más de las protestas que se dan a lo largo de todo el país, porque  “se interesa por lo que está pasando y porque tiene esperanza de de salir de eso”. Hoy día –dijo- las personas están al tanto de lo que ocurre en todo el mundo, gracias a las facilidades que brinda la tecnología de las comunicaciones y especialmente de las redes que les permite el intercambio de información y opinión, y se dan cuenta que lo que ocurre en Venezuela no es algo que se esté dando en el resto de países del mundo.

“La gente sabe que la mayoría de los países del mundo, con menos recursos que los nuestros, han logrado superar situaciones peores que las que se vive en Venezuela actualmente. Entienden que el bienestar se ha convertido en el camino normal de las sociedades del siglo XXI, y los venezolanos nos deprimimos de ver que esto no ocurre en Venezuela, pese a nuestros recursos financieros y humanos; por lo que es necesario que el gobierno entienda que las críticas y manifestaciones de la población no son protestas partidistas ni politizadas, sino que hay una protesta existencial. Los venezolanos están viendo que en el planeta Tierra decenas de países marchan hacia el progreso; que la gente vive con bienestar y que los jóvenes tienen en ellos oportunidad para crecer y en el suyo no; y aquí solo ven mortandad, desempleo, inseguridad, alto costo de la vida, gente muriendo de mengua por falta de medicinas, una policía y unas fuerzas armadas corrompidas y, en general, un inmenso deterioro del país”, expresó.

“Por eso –continuó- le reitero al señor Maduro que las protestas no son nada personal contra usted, las protestas no son de la oposición ni de la mesa de la unidad contra el gobierno, son protestas  existenciales, protestas de dignidad; los venezolanos saben que podemos vivir mejor y que no hay derecho a que estemos hundidos en un mundo  tan oscuro porque usted no sea capaz de convocar a los mejores talentos, o porque usted y sus compañeros no tengan la voluntad de respetar el Estado de derecho para que haya un clima de confianza y vengan los inversionistas.  Hay la necesidad de profesionalizar la administración pública y que  esta  deje de ser esa especie de botín de quienes detentan el poder. El país  está siendo conducido con criterios atrasados, y de eso es que queremos salir. Y no se trata de cambiar a unos por otros; es buscar una mejor manera de organizarnos, de iniciar una manera de vivir en tolerancia y bienestar, de eso se trata. Y lo que hemos venido haciendo los venezolanos es tratar de buscar un cauce práctico, de encontrar unos caminos que nos conduzcan a una manera de cambiar la forma como se está conduciendo el país; y para cambiar esa manera  solo será posible cambiando al que toma las decisiones, y las decisiones las está tomando Nicolás Maduro , Diosdado Cabello…”

El cambio deseado  
       Tras alentar a no desmayar a todos quienes han alzado sus voces de protesta ante la situación descrita y en el empeño de alcanzar el cambio deseado, mencionó Fermín, las que considera la prioridades para ser abordadas ante tal posibilidad. Señaló, en primer lugar, la necesidad de un gobierno  conformado por los mejores talentos, con mujeres y hombres mejor preparados, independiente de su ideología o creencia política, porque en Venezuela –señaló-  actualmente lo que se exige para ingresar a la administración pública es el carnet político.  En segundo lugar, es dedicarle todos los fondos públicos a las prioridades: salud, educación, seguridad de las  personas, protección del ambiente, infraestructura para garantizar el suministro y distribución del agua, alumbrado y gas, entre otros.

Insistió en este sentido, en la necesidad de que el Estado asuma las responsabilidades que les son inherentes como una prestación eficiente de los servicios públicos, construcción de escuelas  y  hospitales bien dotados, y dejar en manos del sector privado la producción de bienes y servicios dentro de los respectivos marcos de legalidad y promoción de la actividad empresarial.

De igual manera, se pronunció por un mejor aprovechamiento del recurso humano al servicio de la administración pública replanteando necesidades y reeducando al trabajador para obtener un mejor rendimiento como funcionarios; brindarle la posibilidad a los médicos integrales formados por el gobierno, para que tengan acceso a una formación que complete su aprendizaje; y en atención a los niños y jóvenes, un programa de aprovechamiento de su tiempo libro, para encausarlos hacia las artes, el deporte y otras actividades formativas.